top of page

Manolito Gafotas ha vuelto a la SER

Manolito nació en la radio ya no recuerdo en qué año y vuelve a ella con total naturalidad. Hace tiempo que decidí que viviera una infancia eterna. Se trata de una sólida tradición literaria a la que me acojo para preservar su inocente manera de observar la realidad, esa mezcla de asombro y perspicacia con la que se enfrenta a sus aventuras cotidianas.
Barras.JPG

Claro que el mundo ha cambiado, desde aquel 1994 en el que se publicó el primer libro está prácticamente irreconocible, pero esas vertiginosas novedades las he ido introduciendo con delicadeza para que no perturben su sólido universo vital. Manolito sigue siendo en esencia el mismo. Sabemos que en la casa de los García Moreno ha entrado, cómo no, la tecnología y que en su barrio la inmigración local ha mutado en internacional; sabemos que parte del negocio local ha dado paso a las franquicias y que la codicia de los inversores inmobiliarios está llamando a las puertas de esta periférica clase trabajadora, pero hay algo que sostiene y protege ese territorio tan suyo, tan nuestro: la sólida relación que mantienen los vecinos y que enamoró a los niños de medio mundo. En el Carabanchel Alto de Manolito los abuelos siguen copando las aceras con sus andadores, los niños abundan en las plazas y los vecinos aspiran a tener un ascensor y que no se les atasque.
Todo destila precariedad, pero también ternura, esfuerzo, humanidad. Esta es una Navidad más de Manolito, pero como él tiende al lenguaje hiperbólico, diremos que esta será la mejor Navidad que viva en el planeta Tierra.




bottom of page